Entorno macroeconómico y sectorial
La economía global se está viendo fuertemente afectada por la pandemia de COVID-19, que se ha extendido a una mayoría de los países del mundo y está afectando de manera escalonada a sus economías debido a las medidas de confinamiento, que restringen la actividad, y a las caídas de confianza de los consumidores y las empresas. Aunque muchos de los países de Asia oriental y de Europa parece que ya han pasado lo peor de la pandemia y ya han abierto de nuevo sus economías, buena parte del continente americano está aún en fase de expansión. Los gobiernos y bancos centrales han puesto en marcha, en general, medidas de estímulo fiscal y monetario, lo cual está ayudando a mitigar el impacto económico, pero ello no evitará que la economía global entre en recesión en el conjunto del año.
Durante el segundo trimestre de 2020, los mercados financieros han permanecido en general estables gracias a las acciones de los bancos centrales desarrollados (anuncios de compras de activos, facilidades de préstamo, reducciones de tipos de interés) y diversos paquetes de estímulo fiscal anunciados por los gobiernos. Además, el proceso de desconfinamiento que se ha producido en la mayoría de los países y el correspondiente repunte de la actividad económica ha contribuido a la mejora de la confianza económica y de la actividad. Con respecto a lo último, los indicadores muestran en general que la contracción hasta abril fue más profunda de lo previsto, pero que la mejora desde mayo es robusta y relativamente generalizada, especialmente en las economías desarrolladas, donde el apoyo de las políticas ha sido más significativo y más eficaz.
En términos de crecimiento global, BBVA Research espera una recuperación en forma de "V" de la actividad económica, pero sin llegar a los niveles de PIB previos a la crisis. Esta recuperación será más lenta de lo previsto y heterogénea en las distintas regiones. El escenario base de BBVA Research se apoya en el supuesto de que surgirán nuevas oleadas de contagios, sin que se desencadenen medidas estrictas de bloqueo, hasta que se disponga de una vacuna o tratamiento para el COVID-19. En consecuencia, se han revisado las previsiones de crecimiento a la baja en 2020 y al alza en 2021, con una mayor pérdida acumulada del PIB en el bienio, especialmente en los países emergentes. Más concretamente, BBVA Research ha ajustado su previsión de crecimiento mundial de -2,4% a en torno al -3,1% en 2020 y de 4,8% al 5,1% en 2021. Aunque hay que tener en cuenta que los factores epidemiológicos, económicos, financieros y geopolíticos mantienen la incertidumbre en niveles excepcionalmente altos y siguen siendo una fuente de riesgo para las previsiones económicas.
En cuanto al sistema bancario, en un entorno en el que durante varios meses gran parte de la actividad económica ha estado paralizada, los servicios bancarios han jugado un papel esencial, fundamentalmente por 2 motivos: En primer lugar, las entidades bancarias han garantizado el correcto funcionamiento de los cobros y pagos de las familias y las empresas, contribuyendo de esta forma al mantenimiento de la actividad económica; en segundo, la concesión de nuevo crédito o la renovación de créditos ya existentes reduce el impacto de la desaceleración económica en los ingresos de las familias y empresas. En la situación actual es muy importante que los problemas de liquidez temporales de las empresas no se conviertan en problemas de solvencia, poniendo así en riesgo su supervivencia y la de los puestos de trabajo. Para ello, el apoyo prestado por los bancos durante los meses de confinamiento y las garantías públicas han sido fundamentales, por lo que la banca se ha convertido en la única fuente de financiación para la mayoría de las empresas.
Aunque en términos de rentabilidad la banca europea y española sigue lejos de los niveles previos a la crisis debido principalmente a la acumulación de capital que han realizado y al entorno de bajos tipos de interés en el que nos encontramos desde hace ya un tiempo, las entidades bancarias afrontan esta coyuntura en una situación saneada y con una solvencia que no ha parado de aumentar desde la crisis de 2008, con unos colchones de capital y liquidez reforzados y, por tanto, con mayor capacidad para prestar.
Europa
En Europa se continúa con la puesta en marcha de paquetes de estímulo fiscal por parte de todas las autoridades europeas pertinentes, la Unión Europea (en adelante, UE) y los estados miembros. Hay dos amplios conjuntos de medidas: garantías de crédito y nuevos estímulos fiscales. En promedio, el estímulo fiscal, más las facilidades de liquidez, podrían representar alrededor del 20% del PIB de la UE. Más importante es la aprobación del fondo de recuperación ("Next Generation EU") aprobado en la UE con una dotación de 750.000 millones de euros (5,4% del PIB de la UE) para apoyar la recuperación en los próximos años tras el COVID-19 a través del fomento de la inversión y la implementación de reformas estructurales. Por su parte, el Banco Central Europeo (en adelante, BCE) ha continuado expandiendo su hoja de balance, consolidando un fuerte incremento en la liquidez (TLTRO III), y ha garantizado la correcta transmisión de la política monetaria en la zona del euro aumentando el programa especial de expansión cuantitativa, Pandemic Emergency Purchase Programme (PEPP, por sus siglas en inglés) en 600.000 millones de euros adicionales, más hasta los 1,35 billones de euros. En términos de crecimiento, el período más amplio de confinamiento, junto con una relajación gradual de las medidas de contención, han llevado a BBVA Research a revisar a la baja el crecimiento en la zona euro hasta el -8,5% en 2020 con un rango entre -7% y -11%, impulsado por el colapso tanto del consumo privado como de la inversión en un contexto de caída de la demanda mundial. Las políticas económicas acomodaticias deberían evitar que se produzcan efectos negativos más persistentes, y apuntalar una recuperación parcial en 2021 (+5,8%, con un rango entre 3,5% y 7,5%), con un nivel de PIB a finales del bienio 2020-21 que estaría alrededor de un 2% por debajo del nivel del cuarto trimestre de 2019.
España
En términos de crecimiento, según las estimaciones de BBVA Research, el PIB español podría contraerse un 11,5% en 2020 (con un rango entre -10% y -15%) y crecer un 7% en 2021 (con un rango entre 3% y 9%). Las medidas implementadas para la contención y el distanciamiento social han durado más de lo previsto, y el impacto en la actividad económica ha sido significativo y mayor de lo inicialmente estimado. Así, a pesar de que la flexibilización de las restricciones ha dado paso a una intensa recuperación de la economía a partir de mayo, la caída acumulada de los niveles de actividad entre finales de 2019 y finales del primer semestre de 2020 podría superar el 20%. Sin embargo, estas previsiones de crecimiento siguen estando sujetas a un alto grado de incertidumbre. En primer lugar, porque dependen en gran medida de la evolución mundial de la pandemia, que condiciona la demanda global y las decisiones de consumo e inversión. Y, en segundo lugar, porque los efectos temporales de las medidas extraordinarias de política económica adoptadas hasta ahora son claramente positivos, pero también existe incertidumbre sobre su grado de eficacia.
En cuanto al sistema bancario, de acuerdo con los datos del Banco de España, el volumen total de crédito al sector privado repunta ligeramente en mayo de 2020 (+2,0% interanual) por el crecimiento de las nuevas operaciones de crédito a empresas desde mediados de marzo, en el marco de los programas de avales públicos puestos en marcha por el gobierno para hacer frente al COVID-19. Por su parte, los indicadores de calidad de activos mejoran ligeramente (la tasa de mora se situó en el 4,73% en mayo de 2020). La rentabilidad entra en terreno negativo en el primer trimestre de 2020 por el significativo impacto del aumento de provisiones por la crisis del coronavirus y por resultados extraordinarios negativos en el trimestre. Adicionalmente, el entorno de bajos tipos de interés mantiene presionada la rentabilidad. Las entidades españolas mantienen holgados niveles de solvencia y liquidez.
Estados Unidos
Las consecuencias del coronavirus están creando una confluencia de fuertes choques de oferta y demanda sobre la economía estadounidense. En principio, el impacto económico directo debería ser grande, pero temporal; sin embargo, los efectos secundarios del shock financiero y de la caída de la actividad en la economía real podrían implicar consecuencias más profundas y una recuperación más lenta. Además, la limitada disponibilidad de datos, la volatilidad de los mercados financieros y las respuestas de política económica y monetaria sin precedentes implican una elevada incertidumbre sobre las perspectivas económicas durante los próximos trimestres. De acuerdo a las previsiones de BBVA Research, el PIB caerá alrededor de un 5,1% en 2020 (con un rango entre -4%y -7%) y aumentará un 3,5% en 2021 (con un rango del 2% y 5%). El gobierno de los Estados Unidos ha puesto en marcha un fuerte estímulo fiscal (en torno al 18% del PIB) que implica un aumento sustancial del déficit y de la deuda pública. Por otro lado, se espera que la Fed mantenga los tipos en torno al 0% por lo menos hasta finales de 2021 y continúe dispuesta a tomar más medidas adicionales de apoyo a la liquidez y compra de activos, si fuera necesario.
En el conjunto del sistema bancario, los datos de actividad más recientes proporcionados por la Fed (junio de 2020), muestran los efectos de los programas puestos en marcha contra el coronavirus, con tasas de crecimiento interanual de créditos y depósitos del sistema del 8,7% y 21,4% respectivamente. La morosidad sigue controlada; así, la tasa de mora se sitúa en el 1,52% en el primer trimestre de 2020.
México
De acuerdo con las previsiones de BBVA Research se espera una fuerte contracción derivada de la crisis del COVID-19 y una recuperación lenta después, en un contexto de debilidad de la inversión. La previsión de crecimiento del PIB de BBVA Research es de una caída de 10% para 2020 con un rango de entre -12% a -9%, y una recuperación parcial en 2021 con un crecimiento de 3,7% (en el rango del 2% al 4,5%). La recuperación será lenta y no exenta de riesgos. La crisis habrá afectado fuertemente al empleo y el ingreso de los hogares; en la primera mitad de 2020 se han perdido casi un millón de empleos formales, lo que implicará una importante caída en el consumo privado. Se estima además una contracción de la inversión del 20,5% en 2020. El Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (TMEC) entró en vigor el 1 de julio; el nuevo tratado representa una oportunidad relevante de mediano plazo para que México atraiga flujos de inversión extranjera y desarrolle las cadenas de suministro locales. En el contexto de la fuerte caída del PIB, BBVA Research estima que la inflación se mantendrá bajo control, lo que allanará el camino para que Banxico continúe con su bajada de los tipos de interés de referencia, que se podrían ubicar en torno al 3% a final del año, desde su nivel actual de 5%.
El sistema bancario siguió creciendo en términos interanuales. Con datos de la CNBV a mayo del 2020, los créditos y los depósitos crecieron un 7,7% y un 13,8% interanual, respectivamente, con aumentos en todas las carteras. La morosidad se mantuvo contenida (2,41% en mayo de 2020, frente al 2,16% doce meses antes) y los indicadores de capital son holgados.
Turquía
Para Turquía BBVA Research espera que el PIB se mantenga estable en 2020 (crecimiento 0%), para posteriormente aumentar un 5,0% en 2021. La economía turca creció 4,5% anual en el primer trimestre de 2020 y se estima una contracción de 7,1% en el segundo trimestre. Sin embargo, BBVA Research considera que las políticas fiscales y monetarias expansivas, así como las medidas de apoyo y la aceleración del crecimiento del crédito además de la expectativa de relativa normalización de la actividad en el mundo, tengan un efecto positivo en la actividad económica en la segunda mitad el año, que no estará sin embargo exento de riesgos, por lo que el rango estimado de previsión está entre el -3% y 1%.El banco central recortó los tipos de interés hasta el 8,25% en la reunión de mayo gracias a la relajación de las políticas monetarias en las economías avanzadas y al aumento de los riesgos a la baja de la actividad económica, y continuó con las medidas de apoyo a la inversión en ciertos sectores. BBVA Research estima que la tasa de referencia se quede en el 8,25% el resto del año. Por su parte, la presión sobre la lira turca comenzó a disminuir con la cierta normalización de la economía mundial tras las medidas adoptadas debido a la pandemia.
Con datos de mayo de 2020, el volumen total de crédito en el sistema bancario aumentó un 24,1% interanual (+33,8% en liras turcas y +10,0% en moneda extranjera). Estas tasas de crecimiento incluyen el efecto de la inflación, que fue del 11,4% interanual a mayo de 2020. El ratio de mora se situó en el 4,54% a cierre de mayo de 2020.
Argentina
BBVA Research estima que el crecimiento se contraiga este año entre 13% y 16%, con una estimación puntual de 14%, y que se recupere parcialmente hacia 2021 con una expansión de entre 3% y 6% (estimación puntual de 5,2%). Argentina ya atravesaba una de las recesiones más largas de su historia cuando surgió el brote de la epidemia de COVID-19. Con uno de los confinamientos más tempranos y más largos del continente, BBVA Research espera un impacto muy severo para la economía, la cual mantendrá vulnerabilidades importantes en los siguientes años. Las extensiones en la cuarentena han ido acompañadas de apoyo fiscal por parte del gobierno, focalizado ahora a algunos sectores y regiones. La financiación del déficit fiscal a través del banco central supone un riesgo para la inflación en el medio plazo. BBVA Research considera como hipótesis de trabajo que el gobierno alcanzará un acuerdo de renegociación exitoso con los acreedores.
En el sistema bancario, continúa la senda positiva de crecimiento tanto de crédito como de depósitos en 2020, si bien con notable influencia de la elevada inflación. Con datos a abril de 2020 los indicadores de rentabilidad se deterioraron notablemente (ROE: 18,9% y ROA: 2,8%) debido al efecto COVID-19 luego de alcanzar máximos históricos a cierre de 2019. Por su parte, la tasa de mora desciende ligeramente hasta el 5,3% en marzo de 2020.
Colombia
Las disrupciones en la producción y el consumo relacionadas con la pandemia de COVID-19 suponen caídas fuertes de los componentes de la demanda, principalmente en el consumo y la inversión, en el segundo trimestre del año, período en el que la contracción de la economía habría llegado a ser de 17% interanual. La apertura de la economía no está siendo homogénea ni por sectores de la actividad ni por regiones del país, con lo que estimamos que la recuperación será muy gradual y lenta a partir de la segunda mitad del año. Para el 2020 BBVA Research estima una contracción de 7,5% (con un rango entre el -5,5% y el -10%) anual con caídas importantes en el consumo y la inversión. Para 2021 BBVA Research estima una recuperación parcial con un efecto base de comparación importante y que dicha recuperación sea lenta en parte por la necesidad de reasignación de recursos, la alta mortalidad empresarial y la pérdida de ingresos de las familias. En este contexto el banco central ha reducido la tasa de interés de referencia en 175 puntos básicos desde el inicio de la pandemia, lo que se estima que continuará haciendo, hasta llevarla al 2% (desde 2,5% actual) para el tercer trimestre; además ha llevado a cabo programas de inyección de liquidez en la economía además de programas de compra de bonos. El escenario para 2020 y 2021 es aún muy incierto, tanto por el lado epidemiológico como los efectos de la gradual apertura en la economía. Esto pese al esfuerzo del gobierno por relajar la Regla Fiscal que ha sido suspendida para este y el siguiente año, con el objeto de ampliar medidas de ayudas a la economía; BBVA Research estima que el déficit del gobierno se ubique en 8,2% del PIB en 2020.
El crédito total del sistema bancario creció un 11,8% interanual en abril del 2020, gracias al elevado crecimiento de la cartera de empresas impulsada por los avales y programas de garantías aprobados por el gobierno durante la pandemia, con una tasa de mora del 4,3%. Los depósitos totales aumentaron un 18,3% interanual en el mismo período.
Perú
BBVA Research estima que el PIB de Perú se ha contraído algo más de 30% anual en el segundo trimestre de 2020 principalmente como resultado de las medidas tomadas para limitar la propagación del COVID-19. Para 2020 en su conjunto, se estima una contracción de cerca del 15% con un rango de entre -18% y -12%, que asume que las restricciones impuestas durante el confinamiento se irán retirando gradualmente de acuerdo con el plan del gobierno. Para la segunda mitad del año se estima una contracción de 11% interanual. Hacia 2021 se estima un crecimiento del PIB de cerca de 8% (rango de entre 6,5% y 10,5%). El déficit fiscal se ampliará hasta alrededor del 9,4% al final de 2020, como resultado del esfuerzo fiscal que se ha implementado para aliviar los impactos negativos del COVID-19 sobre familias y empresas. Estos esfuerzos son parte de un programa más amplio equivalente al 16% del PIB, de acuerdo a fuentes oficiales. Además el banco central ha recortado el tipo de interés de referencia en 100 puntos base entre marzo y abril, llevándolo a 0,25%, nivel históricamente bajo. BBVA Research estima que esta tasa permanecerá así por un tiempo prolongado y que continúe con los programas hasta ahora implementados de provisión de liquidez en el sistema financiero y sostenimiento de cadenas de pagos a través del programa “Reactiva Perú”.
El sistema bancario presentó tasas elevadas de crecimiento interanual en créditos y depósitos (+12,1% y +13,3% respectivamente, en abril del 2020), con niveles de rentabilidad afectados por el confinamiento (ROE: 15,7%) pero con una morosidad contenida (tasa de mora: 2,6%).
Tipos de interés(Porcentaje)
30-06-20 | 31-03-20 | 31-12-19 | 30-09-19 | 30-06-19 | 31-03-19 | |
---|---|---|---|---|---|---|
Tipo oficial BCE | 0,00 | 0,00 | 0,00 | 0,00 | 0,00 | 0,00 |
Euribor 3 meses (1) | (0,38) | (0,42) | (0,39) | (0,42) | (0,33) | (0,31) |
Euribor 1 año (1) | (0,15) | (0,27) | (0,26) | (0,34) | (0,19) | (0,11) |
Tasas fondos federales Estados Unidos | 0,25 | 0,25 | 1,75 | 2,00 | 2,50 | 2,50 |
TIIE (México) | 5,00 | 6,50 | 7,25 | 7,75 | 8,25 | 8,25 |
CBRT (Turquía) | 8,25 | 9,75 | 12,00 | 16,50 | 24,00 | 24,00 |
- (1) Calculado como media del mes.
Tipos de cambio (Expresados en divisa/euro)
Cambios finales | Cambios medios | ||||
---|---|---|---|---|---|
30-06-20 |
∆% sobre 30-06-19 |
∆% sobre 31-12-19 |
1er Sem. 20 |
∆% sobre 1er Sem. 19 |
|
Dólar estadounidense | 1,1198 | 1,6 | 0,3 | 1,1018 | 2,5 |
Peso mexicano | 25,9470 | (15,9) | (18,2) | 23,8753 | (9,3) |
Lira turca | 7,6761 | (14,5) | (12,9) | 7,1541 | (11,1) |
Sol peruano | 3,9470 | (5,2) | (5,7) | 3,7631 | (0,3) |
Peso argentino (1) | 78,8283 | (38,1) | (14,6) | - | - |
Peso chileno | 914,16 | (15,4) | (8,0) | 895,43 | (14,8) |
Peso colombiano | 4.209,23 | (13,6) | (12,5) | 4.066,28 | (11,4) |
- (1) En aplicación de la NIC 29 "Información financiera en economías hiperinflacionarias", la conversión de la cuenta de resultados de Argentina se hace empleando el tipo de cambio final.