“ No dudaron en pedir el préstamo hipotecario en BBVA”
Eva quería la ciudad; Tomás prefería el campo. Ganó la ciudad. Tomás propuso en el centro; Eva prefería en las afueras. Fue en el centro. Eva imaginaba un apartamento pequeño; Tomás un lugar pequeño pero con terraza. Fue un dúplex pequeño. No dudaron en pedir el préstamo hipotecario en BBVA. Hoy, Tomás quiere llenar las paredes de cuadros. Eva, claro, prefiere estanterías. Afortunadamente, tienen dos plantas.